lunes, 13 mayo 2024
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Trabajadores del aluminio trancan avenida Guayana y amenazan con radicalizar protestas si gobierno viola escala salarial

“Si el viernes tiran la corrida con el tabulador de la administración pública tengan por seguro que vamos a cerrar Guayana por los cuatro costados, van a conocer quiénes somos todos los trabajadores”, sentenció el secretario general de Sutrapuval, José Hidalgo.

María Ramírez Cabello

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Cinco horas estuvo cerrada la principal vía de acceso a Ciudad Guayana, en la mañana de este martes, debido a una protesta de trabajadores del sector aluminio, a los que se sumaron empleados de las briqueteras, Ferrominera Orinoco y Sidor, quienes reclaman el respeto a los tabuladores salariales establecidos en el contrato colectivo. 

Los afectados suman más de dos semanas de protesta por una inquietud que bien pudiera ser resuelta por las autoridades gubernamentales que, en este periodo, han preferido guardar silencio absoluto. Las manifestaciones, en cambio, se han instalado en casi todos los portones de las estatales de Guayana, ante la presunción de que no habrá correctivos y se aplicará la tabla salarial de la administración pública, lo que implica desconocer una serie de conceptos ya acordados con el Ministerio del Trabajo y las organizaciones sindicales. 

“Vamos a seguir arreciando con las protestas y las luchas porque no estamos pidiendo nada adicional, sino que se respete lo que ya tenemos por derecho”, dijo el secretario de Finanzas del Sindicato Único de Trabajadores Profesionales Universitarios de Venalum (Sutrapuval), Ángel Brito, quien detalló que el primer nivel del tabulador establecido en los contratos colectivos tiene una diferencia de 16,5% por encima del salario mínimo. 

A partir de este monto, debe hacer una separación de 4% internivel hasta la escala gerencial 42, a partir de la cual la diferencia es de 8% internivel hasta el último escalafón. El contrato de la administración pública, detallan, implica una distancia inferior a 1% y las escalas se comprimen de 1 a 1,5 salarios mínimos. 

“Tenemos 15 días en protesta”, recordó el trabajador de Bauxilum, Rolando Muñoz, quien acusó directamente de cercenar los beneficios laborales al expresidente de la Corporación Nacional del Aluminio y actual miembro de la Asamblea Constituyente, Ángel Marcano. “La tabla de la administración pública que parte de Bs.S 1.800 el primer nivel la están corriendo hoy en Bauxilum. Nos están vulnerando nuestros derechos”, agregó. 

“Están dejando los mismos niveles pero les están quitando la separación”, señaló. 

Al sitio de la concentración acudió la presidenta del Consejo Legislativo del estado Bolívar (CLEB), Erika Zambrano, quien exhortó a dar respuesta a la masa laboral e invitó a la dirigencia sindical a exponer el reclamo en el ente legislativo estadal. “Zambrano dijo que no pueden eliminar los derechos ya establecidos, tienen que ir en progresividad (…) No estamos guarimbeando”, expresó. 

El secretario general de Sutrapuval, José Hidalgo, dijo que las expectativas se centran en el viernes, cuando deben cancelarse las quincenas correspondientes al 30 de septiembre. “Le vuelvo a advertir, si el viernes tiran la corrida con el tabulador de la administración pública tengan por seguro que vamos a cerrar Guayana por los cuatro costados, van a conocer quiénes somos todos los trabajadores”, sentenció. 

Miguel Ekar, secretario de Cultura y Propaganda de Sintralcasa, indicó que desconocer el tabulador es una violación de las convenciones colectivas, la Ley Orgánica del Trabajo y la Constitución, que establecen el principio de progresividad. “No lo vamos a aceptar, vamos a seguir en la lucha y llamo a todos los trabajadores del sector aluminio y hierro, acá se está jugando el beneficio de sus familias y sus hijos, les pedimos que se unan a esta lucha”, recalcó.

 “Los tabuladores han sido discutidos con técnicos especialistas de acuerdo a los años de servicio y las áreas contaminantes, eso es lo que estamos defendiendo”, añadió, al tiempo que destacó que se acerca el pago de las utilidades, con lo cual es más de urgente defender los acuerdos previos. 

Diego Torres, trabajador de Bauxilum, defendió que no es que los trabajadores de las empresas básicas merezcan más, sino que su trabajo está establecido en una escala específica por el grado de riesgo y contaminación en el que se desempeñan. “Todos los días venimos a cambiar nuestra vida por dinero”, afirmó. “Salimos como chatarra humana”, agregaron otros. 

Dirigentes del sector aluminio viajaron recientemente a consignar un amparo ante el Ministerio del Trabajo y la Defensoría del Pueblo, como parte de las acciones en defensa de los tabuladores salariales.