jueves, 28 marzo 2024
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Corte de suministro de gas vehicular perjudica flota de transporte público de Ciudad Guayana

La medida de Pdvsa Auto Gas afecta mayoritariamente a las unidades de transporte público. Transportistas exigen acelerar el proceso de inspección en las unidades que instalaron el sistema, para contar con el suministro paliativo a la crisis de la gasolina y el gasoil. | Foto William Urdaneta

@mlclisanchez

Transportistas de Ciudad Guayana protestaron este lunes y martes trancando la avenida principal de Castillito a la altura de la estación de servicio, y obstruyeron el paso desde el cruce de la 45 hasta la sede de la Corporación Venezolana de Petróleo (CVP) en Unare.

¿La razón? Hace 14 días Pdvsa Auto Gas -por orden del Ejecutivo nacional y el Ministerio para la Energía y Petróleo (Mppep)- notificó a los usuarios la suspensión del suministro de Gas Natural Vehicular (GNV) para los vehículos carburados alegando que la instalación del sistema dual en estos carros puede causar explosiones.

Los transportistas informaron que autoridades de la CVP-Pdvsa manifestaron tomar esa decisión a raíz de la explosión de una unidad de transporte público mientras surtía GNV en una estación de servicio de Barcelona, estado Anzoátegui, el 4 de agosto de este año. La explosión dejó un saldo de al menos ocho heridos y un fallecido y fue atribuida al colapso del improvisado sistema de gas vehicular que tenía la unidad.

La suspensión del suministro afecta a al menos 90 unidades de transporte público que desde el año pasado instalaron de forma particular el sistema dual para trabajar alternativamente con GNV y gasoil, ante la crisis de la gasolina y el despacho irregular de gasoil en Ciudad Guayana.

Si el vehículo carburado está en buenas condiciones es tan seguro como un vehículo inyectado. Pero debe haber un correcto mantenimiento de los vehículos. Si tiene cables y bujías en buen estado, el motor en buen estado, no tiene por qué explotar…”
Ysrael Torrealba, especialista en sistemas de GNV

 

Los transportistas informaron que llevan 14 días esperando una inspección de la CVP para así contar con el aval de Pdvsa para surtir GNV nuevamente.

“Lo que se quiere es que el gobierno tome cartas en el asunto y mande técnicos especializados en el sistema para hacer las correcciones y aprobaciones a quienes ya han hecho esa inversión en el sistema dual”, manifestó Nancy González, presidenta de una de las líneas de transporte público de la urbe.

Los transportistas informaron que para trabajar con GNV hicieron una inversión de al menos 900 dólares divididos en la compra del sistema dual (300 dólares), las bombonas de gas vehicular que se consiguen usadas en el mercado (150 dólares c/u) y la mano de obra especializada, que oscila 200 dólares más.

“Nosotros no nos negamos a ningún tipo de inspección, pero nos clausuraron el suministro sin darnos una alternativa de revisión. En la región no hay ningún centro de conversión activo, no hay alternativa. Nosotros no somos los únicos que no estamos ‘certificados”, manifestó Juan Rivas, otro transportista.

En estos últimos 14 días los transportistas han logrado surtir GNV en cuatro ocasiones, tras protestar en la única estación de servicio donde se les permite surtir, E/S Cachamay, en Castillito, Puerto Ordaz. 

¿El sistema dual es más peligroso en vehículos carburantes? 

No. Los vehículos carburantes corren el mismo riesgo de explosión que los vehículos con un sistema de inyección (la mayoría de los vehículos actuales) si el sistema dual de GNV se instala de forma improvisada y si no se tiene un óptimo mantenimiento preventivo de mangueras y bujías.

Especialista sostiene que la instalación del sistema de GNV es seguro en vehículos carburados mientras las condiciones mecánicas del vehículo sean óptimas | Fotos William Urdaneta

“Es tan peligroso como en un vehículo inyectado… lo que pasa es que los vehículos carburados son viejos, y la mayoría tiene los cables y bujías malos, bobinas deficientes, y eso causa explosiones”, explicó el especialista en sistemas de GNV, Ysrael Torrealba.

A diferencia de la gasolina, el gas natural requiere que el vehículo esté en óptimas condiciones mecánicas, de lo contrario, puede generar accidentes.

“Si el vehículo carburado está en buenas condiciones es tan seguro como un vehículo inyectado. Pero debe haber un correcto mantenimiento de los vehículos. Si tiene cables y bujías en buen estado, el motor en buen estado, no tiene por qué explotar…”, aseguró.

Sin embargo, no hay quien supervise el estado de la mecánica de los vehículos que hoy optan por instalar el sistema dual de combustible. 

Migración al proyecto huérfano de Pdvsa 

Para trabajar con GNV los usuarios deben certificarse a través del Ministerio de Transporte. Sin embargo, esto no se cumple.

Ante la crisis de combustible –que acabó con 60% la flota de transporte público en Ciudad Guayana en el último año-, usuarios que se trasladan con vehículos a gasolina o gasoil optaron por instalar (o reinstalar) el sistema de GNV, el proyecto huérfano de Pdvsa Auto Gas que cada vez adquiere más relevancia como alternativa de movilización para conductores particulares y transportistas.

En 2006, Pdvsa Gas relanzó el programa de Gas Natural Vehicular para promover una alternativa de combustible menos contaminante. El plan gubernamental era incorporar 350 puntos de surtido de gas en todo el país y reactivar 148 estaciones a gas que ya estaban instaladas, pero que no funcionaban.

El proyecto venía acompañado de la instalación de talleres de conversión, es decir, talleres automotrices aprobados por Pdvsa para la instalación del sistema dual de combustible en los vehículos.

Los únicos dos talleres de conversión al sistema dual de combustible con GNV ya no están operativos en Ciudad Guayana

Pero el proyecto no prosperó por falta de gerencia eficiente y por la baja demanda de este tipo de combustible en un momento en que era fácil acceder a la gasolina.

De las 12 estaciones de servicio que Pdvsa Auto Gas instaló en Caroní en 2006 solo nueve quedaron habilitadas. En la actualidad solo cuatro funcionan a media máquina, y solo una despachaba combustible a la flota de transporte público.

En su momento Pdvsa Auto Gas también habilitó dos talleres de conversión en Ciudad Guayana que no existen en la actualidad. Esa es la razón principal por la que quienes hoy optan por instalar el sistema de GNV en sus vehículos deben hacerlo de forma particular sin contar con la inspección de Pdvsa.

La resolución 064 publicada en Gaceta Oficial (39.181) establece que todos los organismos y entes del Ejecutivo nacional deben garantizar que al menos 50% de la flota de vehículos automotores del país dispongan de GNV. Y, además, deben garantizar que esas unidades cumplan con las evaluaciones necesarias.

El detalle está en que el decreto promulgado en 2009 excluye de esta medida al transporte público y privado de personas hasta tanto “se determine la tecnología que permita y garantice la conversión de los mismos al sistema GNV, propendiendo al desarrollo de programas pilotos dirigidos al uso exclusivo del mismo como combustible”.

Legalmente, la instalación del kit de conversión se debe hacer según normas técnicas establecidas por el Mppep.

En su momento, el ministerio solicitó a las empresas automotrices la instalación piloto del sistema de GNV en dos vehículos fabricados a partir de 2009, con el fin de que formaran parte de la política automotriz vigente. Los vehículos con sistema carburado no se fabrican desde el año 2000.