jueves, 28 marzo 2024
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Empresas básicas fraccionan pago de utilidades a cálculo desconocido

Las estatales cancelaron 25% del monto correspondiente al beneficio contractual. El abono varió entre cada compañía y cargo del trabajador.

Los trabajadores de las empresas básicas reciben, por segundo año consecutivo, el pago de sus utilidades de forma fraccionado, un 25% del total fue depositado esta semana.

El personal activo y jubilado desconoce la base de cálculo de estos pagos, toda vez que los tabuladores estipulados en las contrataciones colectivas han sido ignorados por mucho tiempo.

En la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), para la nómina mensual el pago máximo fue de casi Bs. 6.000.000. Los de nómina diaria oscilaron entre Bs. 1.200.000 y poco más de Bs. 2.000.000. Algunos cobraron, incluso, Bs. 700.000, menos de 2 dólares.

Los jubilados de la CVG fueron los más perjudicados. Mientras su pensión mensual es de Bs. 600.000, lo que recibieron de 25% de utilidades fue de Bs. 400.000, monto que ni siquiera cubre el costo de una harina PAN.

En el resto de las empresas filiales de la CVG aumentaron los montos, aunque no se corresponden a lo que establecen las convenciones colectivas. En Sidor hubo depósitos de entre 13 millones y hasta 18 millones de bolívares. En Ferrominera, supervisores cobraron hasta 31 millones de bolívares, mientras que los del área administrativa recibieron depósitos de entre 12 millones y 18 millones de bolívares.

Desconocimiento de base de cálculo

Rolando Muñoz, integrante del Movimiento 23 en Bauxilum y la Intersectorial de Trabajadores de Guayana (ITG), rechazó esta metodología de pagos fraccionados de las utilidades, que disminuyen al trabajador la capacidad de cubrir sus necesidades con este beneficio.

“No hay una base de cálculo que los trabajadores podamos manejar como en años anteriores, como está establecido en la contratación colectiva que ellos mismos, los dirigentes del Movimiento 23, la FBT y la Central Bolivariana entregaron y vulneraron”, manifestó Muñoz.

Recordó que en octubre solían efectuarse los cálculos de las utilidades, en las que se incluían todas las incidencias que entraran hasta ese mes. También inciden conceptos como bono vacacional, tiempo de viaje, asignación de vivienda y la prima Pijiguaos en el caso de CVG Bauxilum.

“Sacamos las cuentas y por ningún lado da los montos que fueron depositados a cada trabajador. Hago un llamado a todos los trabajadores de Guayana a que no nos quedemos pasivos, a que salgamos a defender nuestro derecho, el bienestar social y el de nuestra familia”, denunció.

Aseguró que estos depósitos del 25% no alcanzan para costear un mercado, ni la ropa, calzado o juguetes para navidad.

Hiperinflación consume beneficios

El directivo del Sindicato de Trabajadores Profesionales de Venalum (Sutrapuval), Ángel Brito, recibió un pago que equivale a 30 dólares. “A mí me dieron 30 dólares y los gasté en leche y pañales, una latica de leche y unos paqueticos de pañales. Quise comprarle al bebé una ropita y no dio frutos el 25% de esas utilidades, los conjunticos de bebé cuestan 20 y 25 dólares”.

Recordó que en condiciones normales, un trabajador de las empresas básicas podía sacar entre 1.500 y 2.000 dólares de utilidades. Esos montos, considera que tampoco gozarían actualmente, aun restituyendo los beneficios contractuales, debido a la hiperinflación en el país.

“La situación ahorita no es solo producto de la eliminación de los contratos colectivos y tabuladores, sino que indujeron una hiperinflación monumental porque restituyendo el contrato colectivo y las tablas salariales, tampoco llegaríamos a esa suma que hace algunos años podíamos disfrutar. Que con ello podíamos adquirir un carro o parte de la inicial de un vehículo, algunos con otros ahorros compraban vivienda. Vestían bien a sus muchachos, compraban suficiente alimentos y quizás compraban lavadora, cocina o nevera”, manifestó.

Desde 2018, trabajadores de las industrias de Guayana desconocen, incluso, la base sobre la que calculan sus salarios. Tampoco les cumplen con los beneficios que estipulan las cláusulas económicas de las contrataciones colectivas. La dirigencia sindical ha insistido en que para la discusión de un nuevo contrato, los montos deben calcularse según el valor de dólar debido a la evidente dolarización de la economía en Venezuela.