El presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, afirmó que había que ser “realistas” en cuanto a la aplicación del artículo 233 de la Constitución, que establece los mecanismos ante un vacío de poder.
Nicolás Maduro prestó juramento ante un sumiso Tribunal Supremo de Justicia, pese al escaso respaldo internacional por la ilegitimidad de las elecciones de mayo de 2018, que creció este jueves con el rompimiento de relaciones de Paraguay y el desconocimiento del nuevo mandato por parte de la OEA.
19 países de la Organización de los Estados Americanos (OEA) acordaron no reconocer la legitimidad de Nicolás Maduro a partir de este 10 de enero, debido a las violaciones cometidas en el proceso electoral de mayo de 2018 en el que se eligió.
En el mural promovido por el movimiento estudiantil de la UCAB Guayana plasmaron los nombres de los magistrados que avalaron la usurpación de la presidencia de la República por parte de Nicolás Maduro.
Nicolás Maduro exhortó al Grupo de Lima a rectificar en 48 horas, al tiempo que saludó el decreto constituyente que ordena calificar e investigar por “traidores a la patria” a quienes desconozcan al régimen.
Christian Zerpa aseguró que otros magistrados del TSJ quieren desertar, pero temen a ser perseguidos. También denunció que hay factores de oposición que son de gobierno.
El presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, reconoció este sábado -durante la juramentación de la nueva directiva del Poder Ejecutivo- los errores y omisiones del Parlamento que, tras generar expectativas, dejaron una deuda pendiente con los venezolanos.
La coalición de organizaciones que trabaja por el rescate de la democracia informó que el 5 de enero está previsto que el diputado Juan Guaidó asuma como presidente de la Asamblea Nacional.
El depender de que algo suceda no se justifica, sin embargo, cuando lo que está en la mira exige desde ya una definición y un ineludible compromiso. Aquí la historia interpela como imperativo a la propia libertad.
El 10 de enero de 2019 se está convirtiendo en una fecha simbólica, y hay la sospecha que se puede quedar en el puro simbolismo, si no se acuerpa una fuerza que desde la denuncia de la ilegitimidad de Maduro, se comprometa a fondo a superar la hegemonía.