El Congreso de Ciencias políticas ULA 2024, realizado en el Aula Magna de la Universidad de Los Andes, los días 9 y 10 de mayo, contó con la participación de Jesús María Casal, Benigno Alarcón, Guillermo Tell Aveledo, José Manuel Puentes y Luis Vicente León como invitados especiales.
Los académicos ofrecieron retrospectivas de la historia política venezolana, analizaron el comportamiento de protagonistas y ciudadanía, analizaron la realidad nacional desde la perspectiva constitucional y económica, revisaron posibles escenarios pre y post 28 de julio, y coincidiendo en la existencia y necesidad de una transición pacífica e inclusiva, así como de posibilidades reales de una recuperación sociopolítica y económica del país con la participación de todos los sectores y el apoyo internacional, despertando la confianza en el actual manejo de las posibilidades de cambio político en el país.
Por su parte el polémico Luis Vicente León aseguró que las actuales tendencias de apoyo a líderes opositores son en realidad la manifestación de rechazo a la actual administración y al deseo del cambio político que representan, advirtiendo no se trata del apoyo a un (a) líder mesiánico.
También explicó sobre la participación del Gobierno de Estados Unidos en las negociaciones entre el Gobierno venezolano y la oposición, asegurando que la administración de Maduro nunca aceptó habilitar a María Corina Machado, a pesar de ser inconstitucional su inhabilitación, y que el silencio oficialista es síntoma de que algo están planeando, advirtiendo a dejar los triunfalismos y decir la verdad a los ciudadanos.
Los ponentes locales conceptualizaron temas políticos y constitucionales, exponiendo la necesidad de llevar conocimientos básicos sobre las ciencias políticas a los ciudadanos, y el conocimiento de las leyes, como temas transversales a la cotidianidad, a pesar de la posición de muchas personas al sentirse alejados de los temas políticos del país, situación que también merece un análisis minucioso por parte de actores políticos partidistas de la oposición, pues esa actitud y descontento es capitalizado por el sector oficialista.
